Brasil, la anfitriona de la Copa
Confederaciones, juega esta noche (21.00) contra México su segundo
partido en la competición. El país organiza este torneo, el Mundial de
fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016. Mientras tanto, las
calles de la potencia sudamericana se llenan de cientos de miles de
ciudadanos que protestan por la falta de inversión pública en educación,
sanidad o transporte, lo que ha obligado a las fuerzas de seguridad a
rodear los estadios. Las estrellas locales no han escapado al ambiente.
Neymar, fichado este verano por el Barcelona y el jugador más desequilibrante de su selección, que marcó un impresionante tanto en la primera jornada contra Japón (3-0), se ha expresado con claridad en las redes sociales.
"Triste por todo lo que está pasando en Brasil", ha escrito y publicado a través de su cuenta de Instagram.
"Siempre tuve fe en que no sería necesario que llegáramos al punto de
tirarnos a la calle para exigir mejores condiciones de transporte,
sanidad, educación y seguridad, sobre todo [porque] es una obligación
del gobierno... ", ha proseguido. "Mis padres trabajaron mucho para
poder ofrecerme a mi y mi hermana un mínimo de calidad de vida... Hoy,
gracias al éxito que ustedes me proporcionan, podría parecer demagógico
por mi parte --pero no lo es-- levantar la bandera de las
manifestaciones que recorren todo Brasil", ha añadido. "Pero soy
brasileño ¡y amo a mi país! ¡Tengo familia y amigos que viven en Brasil!
¡Por eso también quiero un Brasil más justo, más seguro, más saludable y
más honesto! La única forma que tengo de representar y defender a
Brasil es dentro del campo, jugando al fútbol... A partir de este
partido, contra México, entro en el campo inspirado por esas
movilizaciones. Estamos juntos", ha cerrado el futbolista.
Neymar no ha sido el único futbolista que
se ha manifestado a favor de las protestas. Más claro que el actual
jugador del Barça ha sido uno de sus predecesores en el equipo
azulgrana, otra gran estrella del fútbol brasileño, Rivaldo que se ha
expresado con contundencia.
"Es una vergüenza estar gastando tanto
dinero en esta Copa del Mundo y dejar los hospitales y escuelas en
condiciones tan precarias", ha escrito en su twitter.
"Tanta violencia, tanto desorden. En este momento no estamos en
condiciones de tener una Copa del Mundo, no la necesitamos, necesitamos
educación y salud", ha añadido. "Necesitaba desahogarme porque yo fui
pobre y sentí en la piel la dificultad de estudiar en la escuela pública
y de no tener un buen servicio de salud. Hasta hoy duele cuando
recuerdo que mi padre fue atropellado y murió por no haber sido atendido
en un hospital público de Recife..."
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